Estabilidad y experiencia profesional

Todos somos conscientes de la situación de inestabilidad que vive buena parte de nuestro profesorado, principalmente el interino y el que ha logrado obtener una plaza en convocatorias recientes. La grave crisis internacional que nos afectó años atrás, y que aún hoy sigue coleando, ha afectado de manera generalizada a esta situación, creando plantillas más inestables que las existentes antes de la crisis.

Ante esta situación, cabe ser críticos y preguntarnos cómo puede estar afectando esta cuestión a la eficacia escolar, de manera que se establezca una evidencia clara sobre la relación entre eficacia y estabilidad laboral de la plantilla de una escuela. Al respecto, los resultados obtenidos gracias a este proyecto son transparentes, la estabilidad de la plantilla docente es el factor del profesorado más claramente relacionado con la alta eficacia:

  • En las escuelas eficaces la mayor parte de la plantilla de profesores cuenta con una amplia experiencia profesional, veteranía en el centro y estabilidad laboral. Mientras que la experiencia y estabilidad del profesorado es un elemento fundamental, debe ir acompañado necesariamente de otros factores para asegurar la eficacia escolar.
    • Los centros en los que existe una movilidad muy importante del profesorado (una gran parte son recién llegados al centro en el año escolar en curso) o en los que la mayor parte de la plantilla cuenta con pocos años de experiencia profesional se asocian a la baja eficacia.
    • En las escuelas de baja eficacia es habitual encontrarse con plantillas inestables, con escasez de profesores con contrato fijo y destino definitivo en el centro.

   Satisfacción profesional y laboral

Y no sólo podemos destacar en nuestro estudio estos resultados, sino que también se detecta otro factor íntimamente asociado a la estabilidad de la plantilla como son sus niveles de satisfacción laboral y profesional. Parece que niveles muy limitados de satisfacción general de los docentes se asocian de manera muy clara con la baja eficacia:

  • El profesorado de las escuelas menos eficaces muestra de manera generalizada unos niveles de satisfacción docente bajos o muy bajos, siendo un factor determinante que caracteriza las escuelas de baja eficacia. No se localizan factores o prácticas que protejan la eficacia en entornos con un profesorado insatisfecho.
    • El profesorado de las escuelas eficaces declara estar satisfecho de manera generalizada, tanto con la propia escuela como con su propia labor profesional como docente. Si se le pregunta, este profesorado recomienda el propio centro educativo como un buen lugar para trabajar.
    • Mientras que los bajos niveles de satisfacción son condición suficiente para identificar una escuela de baja eficacia, los altos niveles de satisfacción por sí mismos no aseguran la eficacia escolar, siempre deben ir acompañados de otros factores protectores de la eficacia como el desarrollo profesional docente amplio del profesorado.